En el corazón del Amazonas colombiano, El Proyecto REDD+ “Aire de Vida”, desarrollado en el Resguardo Indígena de Monochoa (Solano, Caquetá), protege más de 353.000 hectáreas de selva amazónica y representa un modelo de justicia climática con raíz profunda.
El bosque se protege desde el territorio, con gobierno propio, visión cultural y herramientas científicas, alineadas a los conocimientos ancestrales de la zona, de la mano de líderes como Héctor Ortíz “Tucuari”, quien en la imagen muestra algunas de las plantas medicinales que se encuentran en el resguardo.

REDD+ Aire de Vida: proteger con identidad
Desde 2018, este proyecto ha evitado la emisión de más de 3,9 millones de toneladas de CO₂, certificadas bajo el estándar BioCarbon Registry. A su vez, se ha priorizado el fortalecimiento de la gobernanza indígena, gestionando procesos internos de sostenibilidad productiva a nivel agrícola, como también, la consolidación de una infraestructura social acorde a los requerimientos de la comunidad.
Yauto Sostenible (coordinación comunitaria), Carbo Sostenible (diseño técnico) y Terra Commodities (mercados climáticos) realizan el acompañamiento técnico y apoyan en la arquitectura operativa, mientras la ejecución es realizada por la comunidad.
Esta estrategia articula el conocimiento ancestral con ciencia moderna. La identidad cultural, la autonomía política y la seguridad del territorio acompañados de metodologías REDD+ y mecanismos financieros innovadores hacen de este uno de los proyectos comunitarios más robustos del país.
Sostenibilidad desde el territorio.